La listeriosis también es llamada “enfermedad del ensilado” o “enfermedad de los círculos” porque sus manifestaciones principales son brotes de abortos o vacas con infecciones del bulbo raquídeo (en el cerebro) que provocan que los animales caminen sin control en círculos.
La alimentación con ensilado contaminado era más común en el pasado, cuando se alimentaba a los animales con ensilado de forraje que había sido depositado en hoyos en el piso. Listeria es parte de la flora normal del suelo y frecuentemente contamina los ensilados de forrajes almacenados en silos en el suelo o en trincheras con piso de tierra. Actualmente, la mayoría de los silos no entran en contacto con la tierra y están por encima del nivel del piso.
Listeria ha desarrollado grandes capacidades de supervivencia a medios ácidos y puede sobrevivir en forrajes ensilados incorrectamente. Puede haber altas concentraciones de Listeria en las raciones integrales y entonces se presentan brotes de abortos. La bacteria tiende a localizarse en la placenta y evade el sistema inmune de la vaca, que es más vulnerable durante la gestación.
Más comúnmente, vemos casos esporádicos de la “enfermedad de los círculos”. En este caso, la bacteria invade el nervio trigémino que alcanza estructuras en la cabeza y la boca, y desde allí se desplaza hasta el bulbo raquídeo, en el cerebro, formando pequeños abscesos que interfieren con el equilibrio del cuerpo y otras funciones importantes. El ganado afectado tiende a presentar una sola forma de la enfermedad, pero no las dos; esto es probablemente debido a mecanismos diferentes de infección.
Las becerras pueden presentar problemas de septicemia y meningitis, siendo esta la tercera de las tres formas más comunes de la enfermedad. Las becerras con listeriosis se encuentran echadas, con la cabeza en una posición anormal, o simplemente pueden ser encontradas muertas.
Los mecanismos de la infección en becerras son similares a los del ganado adulto y pueden ocurrir cuando hay numerosas listerias en el alimento o en el ambiente inmediato de los animales. En las becerras de menos de dos semanas de edad puede haber infección del color umbilical. Es importante que el veterinario haga el diagnóstico diferencial en estos casos.
El diagnóstico de la listeriosis en bovinos puede ser problemático, deben enviarse los fetos abortados al laboratorio, en donde pueden confirmarlo con cultivo o por la prueba de PCR. El tratamiento de los animales enfermos se puede hacer con penicilina o con oxitetraciclina, pero no use los dos antibióticos simultáneamente, porque son antagonistas en sus acciones.
La listeriosis es una zoonosis, una enfermedad transmisible a los humanos a través de la leche o las heces. El contagio puede ocurrir frecuentemente sin signos clínicos, como mastitis o diarrea. Listeria raras veces causa problemas en personas adultas sanas. Sin embargo, las personas inmunocomprometidas, las mujeres gestantes, niños de menos de 5 años y adultos mayores de 60 años, deben tomar precauciones usando guantes, lentes protectores y ropas especiales, lavándose las manos después de trabajar con ganado. No consuma leche cruda.
El autor está en la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de Wisconsin.
VISITE NUESTRAS SECCIONES
