HOARD'S DAIRYMAN
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¿Es la leche un buen alimento para las becerras?

por Coleen Jones

  Algunas veces las preguntas nos toman por sorpresa y esta pregunta es una que me sorprende cada vez que la oigo. La biología básica dice “sí”, porque la leche está destinada a alimentar a las becerras.
  Pero escarbemos un poco más para entender el contenido nutrimental de la leche. Antes de revisar específicamente a la leche, revisemos algunos principios de nutrición básicos. El crecimiento de las becerras es afectado por muchos factores, pero la ingestión diaria de proteína y energía son lo más importante. La ingestión de energía frecuentemente es el primer factor limitante.
  Si la becerra consume más energía de la que necesita para mantenimiento, esa energía “extra” puede ser usada para convertir la proteína de la dieta en tejidos corporales. Sin embargo, si una becerra consume menos energía de la que requiere para mantenimiento, no habrá energía disponible para crecimiento.
  Las dietas deben proveer energía suficiente para sostener el crecimiento y proteína suficiente para ser usada para ese crecimiento. Alimentar con muy poco de cualquier de los dos nutrientes, o alimentar con la proporción incorrecta de energía y proteína, limitará el crecimiento. La ingestión y composición de los nutrientes de todos los alimentos que consume la becerra (leche, grano o forraje), puede afectar el potencial de crecimiento.

Consideremos los nutrientes que provee la leche

  La leche de las vacas Holstein contiene 3.74% de grasa y 3.05% de proteína verdadera, así como 12.58% de sólidos totales. En base a materia seca, la leche entera proporciona 29.73% de grasa y 25.76% de proteína cruda. El cuadro muestra cómo la cantidad de leche afecta el crecimiento de las becerras, asumiendo que la becerra pesó 45 kilos al nacer, que es alimentada sólo con leche (sin grano) y bajo temperaturas ambiente de alrededor de 20º C.
  Con las tasas de alimentación que se muestran en el cuadro, se cubren más de los requerimientos de energía para mantenimiento. Dependiendo de la cantidad suministrada, el crecimiento de la becerra podría estar limitado por la cantidad de proteína o energía en esta leche. Con 4 litros por día, se proporciona energía suficiente para sostener una ganancia de 350 gramos diarios y proteína suficiente para sostener una ganancia de 400 gramos diarios. Debido a que las becerras se les agotará la energía antes que la proteína, la energía es considerada el factor limitante.
  Con 5, 6 y 8 litros por día, estaremos dando más energía de la que necesita la becerra y el contenido de proteína será el factor limitante para el crecimiento. Alimentar con 8 litros por día, podría resultar en que las becerras ganen un kilo diario, pero también tenderán a almacenar el exceso de energía en forma de grasa. A una tasa de alimentación de 5 a 6 litros por día (o 10 a 12% del peso corporal) se balancea la cantidad de proteína y energía, y permitirá que las becerras ganen peso. Cuando la cantidad dada es ajustada a medida que la becerra va creciendo y se combina con acceso a grano, las becerras alimentadas con leche a esta tasa ganarán buen peso sin engordar excesivamente.

¿Qué pasa con los sustitutos de leche?
  A diferencia de la leche entera, los sustitutos de leche no están limitados por la composición de la leche como es producida por la vaca. Esto hace posible formular productos con contenido de proteína más alto y menos contenido de grasa, en comparación con la leche. A su vez, esto puede proveer un balance más óptimo de energía y proteína para sostener tasas más rápidas de crecimiento sin que las becerras engorden.
  Hay varios factores a considerar cuando se decide qué dar de comer a las becerras y estos factores están usualmente relacionados. Empiece por identificar las metas de su programa de crianza de becerras, entonces compare los costos y resultados esperados de sus opciones, para que pueda seleccionar la opción que cubra sus necesidades. La leche entera es una opción viable en muchas situaciones.

La autora está en la Universidad Estatal de Pensilvania.



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