Supimos que la gripe aviar de hace dos años estaba infectando otras especies de pájaros y mamíferos. ¿Están nuestras vacas en riesgo?
IOWA C.L.
El brote del virus de influenza aviar A, altamente patogénica, también conocida como gripe aviar, sigue vigente y continuó infectando parvadas durante la inmigración otoñal hacia Latinoamérica. Este brote es el más perjudicial en enfermedades exóticas de animales en la historia de Estados Unidos, con más de 60 millones de aves muertas ya sea por infección viral o por los esfuerzos de control.
En 2015 y 2020, recibimos preguntas similares sobre la salud de las vacas, al respecto de la gripe aviar y el COVID-19. No se reportó que la cepa de gripe aviar de 2015 causara enfermedades en mamíferos, pero sí en las especies de aves rapaces. En 2020, parecía probable que el COVID-19 infectara al ganado, pero el virus no se reproduce o disemina, por lo que no supone un riesgo para la salud humana o animal.
La variante de gripe aviar del 2022, parece ser distinta a la de 2015 y hemos encontrado más especies entre los pájaros muertos, además de mamíferos, infectados por esta influenza. Hasta la fecha, se sabe que puede infectar a más de 130 especies (marinas y terrestres mesocarnívoras) después de que comen a los pájaros infectados.
Estas especies mamíferas son hospedadores finales, no tienen signos respiratorios y no diseminan la enfermedad. En muchos casos, presentan disfunción neurológica y mueren de meningitis.
Como los rumiantes no son carroñeros, no se alimentan de pájaros muertos y tienen diferencias en su sistema inmune y anatomía de vías respiratorias, es muy poco probable que una vaca o becerra se infecte con la variante actual de gripe aviar. Hasta donde tengo conocimiento, nunca se ha reportado ningún caso al respecto. Si tiene pollos o patos en el establo, es importante vigilar su salud regularmente. Si es posible, mantenga a los pollos en instalaciones cerradas o físicamente separados de cualquier ave migratoria.
El brote de gripe aviar ha enfatizado la necesidad crítica de mantenerse informado sobre la infraestructura y los recursos disponibles para el manejo de enfermedades importadas. La detección rápida, comunicación y reporte son esenciales. Algunos ejemplos pueden ser la fiebre porcino africana y la estomatitis vesicular en ganado de carne y leche.
El autor es profesor en la Universidad de Wisconsin.
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