HOARD'S DAIRYMAN
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El futuro del negocio lechero

por Gary Sipiorsky

  El primer lugar en donde se puede empezar a trabajar en el futuro de su negocio es saber en dónde está ahora.
  1.- Saque el balance del año anterior. Si no lo tiene, ahora es el momento de prepararlo. Échele un vistazo a tres áreas principales:
  Activos actuales: efectivo, alimentos en bodega, machos en engorda, insumos prepagados e inventarios que pueden ser convertidos en efectivo en los próximos doce meses.
  Activos intermedios: ganado, maquinaria y otros implementos y equipos.
  Activos a largo plazo: instalaciones y tierras (algunos contadores ponen en una sola lista los activos intermedios y los activos a largo plazo).
  Ahora vea el otro lado de la hoja de balance:
  Pasivos actuales: cuentas por pagar a más de 30 días, pagos de intereses de la deuda, capital por vencerse y otros pasivos que deberán pagarse en los meses restantes del año.
  Pasivos intermedios: préstamos para operación, y préstamos para comprar ganado y maquinaria.
  Pasivos a largo plazo: préstamos para construcciones y tierras.
  Ahora ya tiene inventariados sus activos y pasivos totales, pudiendo calcular el valor neto de su granja. Este es el vehículo que lo conducirá al futuro.
  2.- Desde luego que necesitamos combustible para ese vehículo. Se llama ingresos o, mejor aún, flujo de efectivo. Eso nos dice cuánto dinero tiene usted o como crecieron o disminuyeron los activos y pasivos en su hoja de balance. Sea cuidadoso, la declaración de impuestos sólo le dice cuánto dinero le debe al gobierno, no es una buena medición de eficiencia financiera.
  3.- Ahora que sabe en dónde está, ¿hacia dónde irá desde aquí? Eso se llama “un plan de negocios”. Definir este plan implica detenerse a mitad del día y reunirse con la familia y los empleados clave para pensar y hablar sobre lo que se habrá de hacer el año próximo. ¿De qué tamaño será el hato para entonces? ¿Cuáles compras necesitan hacerse? ¿De dónde saldrá el dinero para ese proyecto? ¿Quién estará en el establo para hacer cada cosa?
  4.- Ahora podrá completar el plan con una proyección del flujo de efectivo. Nunca va a ser perfecto cuando termine el presente año, ya que pueden pasar muchas cosas en los próximos meses . . . habrá circunstancias previstas y cosas imprevistas. Piense en un probable precio de la leche, después de todo, ese será el determinante mayor de los ingresos. Seguramente, sólo va a poder hacer un cálculo “aproximado”, en el mejor de los casos.
  Empiece con lo que indican los futuros de la leche, con el comportamiento del mercado mundial de la leche, con lo que piensan en el banco y en el gobierno. Revise los gastos del año pasado para tener una mejor estimación y fíjese en los gastos. Los gastos mayores pueden ser discutidos con sus proveedores.
  5.- Ponga por escrito su plan de negocios y anote el flujo de efectivo proyectado. No se olvide de los cambios físicos en la tecnología que pudiera adquirir. “Si no se ha escrito, no se ha dicho”.
  6.- Ahora piense en los próximos cinco años. Vea las fotos aéreas de su establo tomadas en el pasado. ¿Cómo se verá su granja en el futuro? ¿Quién estará allí cuando ocurran los cambios? ¿Qué es lo que va a hacer para interesar a la generación siguiente?
  7.- Amplíe estas reflexiones a los próximos diez años. No piense ahora en hojas de balance o proyecciones de flujo de efectivo, sólo piense en las inversiones a largo plazo.

El autor es gerente de desarrollo de negocios lecheros de Vita Plus, en Madison, Wisconsin.

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