Tuvimos unas cuantas becerras con heces oscuras que parecían aceite para maquinaria. Es estiércol muy suelto. Se parece al de una vaca adulta con una úlcera sangrante. Unas cuantas becerras se han muerto, a pesar de nuestros mejores intentos para salvarlas.
No habíamos visto esto antes. ¿También las becerras pueden tener úlceras, igual que el ganado adulto?
Indiana. G.V.
Lamentamos mucho escuchar que ha perdido algunos animales. Está en lo correcto al pensar que la apariencia de “aceite de maquinaria” de las heces, se relaciona con un sangrado en el abomaso. Las becerras deben haber estado padeciendo erosiones o ulceración significativa en esa parte del tracto gastrointestinal, del mismo modo que ocurre en una vaca adulta, al inicio de la lactancia, con una úlcera sangrante clásica.
Hay varias condiciones que afectan el abomaso de las becerras antes del destete como úlceras abomasales, abomasitis, y timpanismo abomasal. Sin embargo, solamente las úlceras producen la clase de heces que describe.
Las úlceras son la condición abomasal más común en las becerras, pero en la mayoría de los casos, se consideran un problema de salud secundario que surge con condiciones concurrentes, o pre existentes, como diarrea o neumonía. Se piensa que la condición previa de diarrea o neumonía genera estrés, eso, junto con un llenado abomasal deficiente y el vaciado debido a la disminución del apetito, incrementa la posibilidad de que el ácido dañe el epitelio del órgano. El abomaso de una becerra normalmente tiene un pH ácido, similar al estómago humano.
Exámenes post mortem y al sacrificio, sugieren que hemos subestimado la proporción de becerras con úlceras abomasales. La razón principal es que la mayoría de las becerras con úlceras abomasales tienen signos subjetivos, poco evidentes e inespecíficos, atribuibles al problema primario, como rechazo del alimento, castañeo en los dientes, dolor a la palpación.
En casos severos, las úlceras perforan por completo la pared abomasal, produciendo peritonitis y, en consecuencia, la muerte. O bien, dañan los vasos sanguíneos de la pared abomasal, produciendo las heces que usted describe.
La experiencia sugiere que cuando el sangrado es suficiente como para ser visible en las heces, hay una perdida de sangre significativa y peligro de muerte. Usted no menciona si las becerras afectadas tienen otros problemas de salud, pero cuando la pérdida de sangre es grave, o se presenta peritonitis por la perforación, la úlcera puede volverse el mayor problema de salud de la becerra.
Al igual que con las vacas adultas, algunas becerras con úlceras sangrantes como las que usted describe no sobrevivirán sin una transfusión sanguínea, debido a su anemia severa. Afortunadamente, el volumen de sangre necesario para una transfusión en una becerra es considerablemente menor (generalmente de 1 a 2 litros en una becerra antes del destete). También es mejor evitar la medicación, especialmente con fármacos antiinflamatorios no esteroideos, como la flunixina, porque pueden exacerbar las úlceras.
Hay varias opciones disponibles para humanos y animales de compañía, que reducen la acidez y elevan el pH abomasal. Desafortunadamente, no hay medicamentos buenos, para compensar el costo beneficio y combatir las úlceras de becerras en el establo.
Del mismo modo que con el ganado adulto, algunos animales pueden ser más susceptibles a presentar úlceras. Eso explica por qué algunas las padecen y otras no.
Cuando tratamos las úlceras de becerras en nuestro hospital, intentamos darles tomas de leche más pequeñas y más a menudo. Tomamos medidas extremas para solucionar los otros problemas de salud, evitando fármacos que agraven la situación, y, aunque no sabemos si eso realmente beneficia al resultado, añadimos unos cuantos mililitros de Kaopectate en cada toma de leche.
El autor es profesor en la Universidad de Wisconsin.
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