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Escoja un método para rehidratar becerras

por Sheila McGuirk, D.V.M.


¿Qué piensa sobre los electrolitos orales para mantener hidratadas a las becerras? ¿Son mejores los fluidos subcutáneos?

Minnesota, S.S.

La prioridad número uno para tratar becerras con diarrea es la rehidratación. Es muy común que una becerra con diarrea en la primera semana de vida, presente un nivel moderado de deshidratación. Los signos consistentes con ese grado de deshidratación son morro seco, ojos visiblemente hundidos, o más de cinco segundos para que el pliegue cutáneo en el cuello vuelva a la normalidad.

Para corregir una deshidratación del 8%, se requieren aproximadamente 3 litros para una becerra Holstein de 38.5 kg, o 2.5 lt para una Jersey de 32 kg. Es importante recordar que estas cantidades son adicionales a la alimentación diaria que recibe la becerra.

La rehidratación no es difícil cuando la becerra con diarrea continúa amamantándose. Ofrezca la cantidad normal de leche o sustituto de leche, y el resto complemente con una solución de electrolitos orales (SEO) bien balanceada.

Para becerras con diarrea moderada a severa (llegando a un 10% de deshidratación), que no se amamantan, se sientan o tienen inflamación abdominal, se requieren fluidos intravenosos (IV) o subcutáneos (SC). Consulte con su veterinario cuál sería la mejor opción para estas becerras.

En nuestra clínica, preferimos la administración IV porque permite el acceso al lugar exacto donde el organismo lo requiere, y se puede administrar un volumen mayor ( 3 litros o más) de forma segura. Insertar una aguja IV (o mejor aún, un catéter) en una becerra deshidratada no es simple, pero puede hacerse más fácilmente si coloca a la becerra en una superficie plana elevada, dejando caer la cabeza y cuello en la orilla durante algunos segundos para permitir que la vena yugular sobresalga.

La administración SC es una alternativa, pero limita la cantidad de fluido que puede suministrarse a menos de dos litros en cada ocasión. Los fluidos SC deben formularse cuidadosamente por el veterinario para evitar reacciones, hinchazón dolorosa e infecciones. Desafortunadamente, las becerras muy deshidratadas tienen una absorción lenta de estos fluidos, por lo tanto, la eficiencia es menor, en comparación con una terapia IV.

Otro punto para discutir con su veterinario es tratar a las becerras deshidratadas administrando un volumen menor (100 a 180 ml) de fluidos hipertónicos (solución hipertónica salina o a base de bicarbonato) por vía intravenosa, a continuación, ofrecer agua inmediatamente y SEO a las pocas horas. Puede estimular el consumo de los fluidos calentándolos a la temperatura corporal (37.7ºC a 39ºC) y no olvide revisar que las becerras siempre tengan disponible agua limpia y fresca.

La autora es profesora emérita de la Universidad de Wisconsin.


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