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Investigando la ingestión post destete

por Sarah Morrison, Instituto de Investigación Agrícola William H Miner.


Recientemente, se ha puesto mucho énfasis en el periodo de crianza, así como en la mejora en crecimiento y salud durante el periodo anterior al destete. Sin embargo, la etapa post destete también es importante ya que se trata de una transición muy dinámica porque las becerras deben pasar a ingerir una dieta a base de sólidos. El consumo de alimento iniciador/grano y forraje puede verse afectado por edad, peso corporal, consumo previo de leche o sustituto de leche, temperatura ambiental, disponibilidad de forraje, ingestión de agua y otros. ¿Cuánto alimento deberían consumir y qué está motivando la ingestión en esta etapa? ¿Cuáles son los componentes de la ración post destete que influyen sobre el consumo potencial del alimento ofrecido?

Recientemente, llevamos a cabo una investigación con vaquillas de 9 meses de edad. Se les ofreció grano en pelets a libre acceso y un segundo corte de heno de pasto procesado. Evaluamos el efecto de dos niveles distintos de proteína cruda (PC) 22% versus 26%. Para conseguir estos dos niveles de PC, empleamos salvado de trigo y como resultado, se elevó el contenido de fibra detergente neutro (FDN). En la ración con PC 22% la FDN fue de 24%, en la dieta con PC de 26% la FDN fue de 20%. La concentración de almidón, azúcar y grasa fue similar en ambos casos. El heno de pasto procesado estaba en un 15% de PC, 55% de FDN con un 61% de digestibilidad a las 30 horas.

Como permitimos el libre acceso tanto de grano como de heno, las vaquillas podían comer todo lo que querían. Resultó interesante que vimos más influencia del contenido de FDN del pelet sobre la ingestión, y no del contenido de PC. No hubo impacto sobre el crecimiento y, en general, estas vaquillas crecieron bien con una ganancia promedio diaria de peso de 1.5 kg, a lo largo del periodo post destete.

En promedio, consumieron el 3.2% de su peso corporal como ingestión de materia seca (grano más heno). Esto concuerda con trabajos anteriores reportados en un conjunto de datos de Quigley, mostrando que las becerras de 8 a 17 meses de edad, varían en el consumo de materia seca de 2.5% a 3.5% de su peso corporal. No hubo diferencia en la ingestión como porcentaje de peso corporal entre las distintas dietas, como se muestra en la figura 1.



Resultó interesante que la ingestión como porcentaje de peso corporal fue distinta entre el pelet con mayor porcentaje de FDN (24%) en comparación con el de menor porcentaje (20%). Las vaquillas con más FDN en el pelet consumieron el 0.85% de su peso corporal en FDN, mientras que las del otro grupo mostraron un promedio de 0.77%, como se describe en la figura 2.

En las vacas, la meta típica para consumo de FDN como porcentaje de peso corporal está alrededor del 1.2%. Sin embargo, parece ser que cuando son más jóvenes y reciben grano con heno seco, esta norma general no aplica. Durante las aproximadamente 11 semanas que duró el estudio, la ingestión máxima de FDN que se consiguió fue del 0.9% de su peso corporal. Sería interesante comparar este concepto con otras prácticas de alimentación como la ración totalmente mezclada. Parece haber cierto control de la ingestión de alimento seco mediante las distintas fuentes de FDN, eso podría ayudarnos a predecir mejor el consumo de materia seca en vaquillas.




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