La seguridad en los establos toma muchas formas, y es de mucha ayuda recordar las circunstancias únicas que afectan a las mujeres que trabajan en establos. Más del 30% de trabajadores que operan en los establos de Estados Unidos, son mujeres y hay muchas más que realizan tareas cotidianas en el establo, recordó Tina Kohlman, agente extensionista de la Universidad de Wisconsin.
Kohlman habló con la veterinaria Lindley Reilly sobre las cuatro áreas en que las mujeres tienen más posibilidades de lesiones, si no se toman las precauciones apropiadas.
Equipo: Reilly señaló que cuando se está operando maquinaria pesada, las mujeres permanecen más tiempo en el suelo operando las tomas de fuerza o manejando el trascabo. Eso puede causar problemas porque en general, la estatura de las mujeres es menor y puede ser que no se las vea desde la cabina de la trilladora o tractor. En estas situaciones es vital comunicarse con todas las personas involucradas para saber cuando las mujeres se están moviendo. Asimismo, es importante asegurarse de atar bien el pelo largo cuando estén cerca de equipo en funcionamiento.
Animales: “Usted como mujer, puede trabajar alrededor de animales grandes exitosamente”. Sin embargo, todo el mundo que trabaja alrededor de animales grandes encara riesgos potenciales. Ser más pequeña en estatura puede crear riesgos adicionales, de modo que es necesario utilizar un sistema de sujeción eficiente y no trabajar sola si es posible. Esté alerta de los animales en el entorno, y planee siempre una estrategia de escape, especialmente en las áreas de maternidad donde los animales pueden ser más agresivos.
Hormonas: Probablemente, la mayoría de las mujeres saben acerca de los riesgos de manejar prostaglandina (PGF) si están embarazadas. Al igual que con las vacas, la PGF puede causar aborto en los humanos. Algunos animales preñados pueden también ser portadores de enfermedades zoonóticas que pasan desapercibidas pero que causan aborto en los humanos. Reilly señaló específicamente que eso puede ocurrir con cabras y ovejas. Asegúrese de aclararle a su médico que trabaja en un establo, si está embarazada, especialmente porque tal vez ellos no se den cuenta de los riesgos que eso conlleva. “Siempre le recomiendo a todos que manifiesten todas sus inquietudes, especialmente con sus médicos y los riesgos del establo”, agregó. Los veterinarios y otras mujeres que trabajen en el establo también pueden ayudar.
Salud mental: Las mujeres tienden a sobrecargarse mentalmente tanto del trabajo en el establo como de otras responsabilidades, describió Reilly. “A menudo no tienen muchas salidas para distraerse y olvidar el estrés”, agregó. “Muchas mujeres en las zonas rurales están muy aisladas y no tienen muchas personas con quien hablar, especialmente en un medio como el agrícola”. Animó a que las mujeres que estén agobiadas con esos sentimientos pidan ayuda y encuentren alguien con quien hablar. Si alguien presenta signos de ansiedad o depresión por más de dos semanas, debe hablar con su médico.
La seguridad debe ser parte del día a día en el establo, resumió Kohlman. Estos riesgos son imperativos para tenerlos en mente.
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