En los rumiantes, como es el caso del ganado lechero, pocas cosas son más importantes que mantener el pH ruminal al nivel apropiado para promover la digestión de la fibra y la buena salud. Las investigaciones han demostrado que un pH ruminal más bajo se relaciona con depresión de la grasa de la leche, menos síntesis de ácidos grasos de novo e incluso menos proteína en la leche. Además de una producción menor de leche corregida a sólidos, el pH ruminal bajo se asocia con baja eficiencia digestiva, cojeras y patrones variables de ingestión de alimento.
En los últimos años, las investigaciones nos han permitido priorizar factores clave de la alimentación y manejo que contribuyen a un pH ruminal óptimo. Los tres factores principales en los que debemos enfocarnos son:
1.Balancear para conseguir una fermentabilidad adecuada de la ración.
2.No aglomerar a las vacas en el comedero o en los echaderos.
3.No dejar el comedero vacío.
Proporcionar una dieta muy alta en carbohidratos fermentables... como el almidón... puede producir acidosis ruminal, y ya hemos aprendido a balancear las raciones de forma adecuada para evitar un pH ruminal bajo. Pero la realidad es que las raciones para vacas en producción son altamente fermentables, de modo que también es conveniente considerar el manejo para ayudar a la vaca a responder de forma óptima a estas raciones altas en energía.
Las vacas necesitan sus echaderos
La aglomeración en el comedero provoca que las vacas coman en oleadas (grandes bocados rápidamente) y otros comportamientos no deseados. La aglomeración en los echaderos obstaculiza el tiempo de descanso y la rumia mientras permanecen echadas. Investigaciones recientes en el Instituto Miner nos dicen que cuando hay aglomeración, las vacas que consiguen permanecer echadas al menos entre el 80 y 90% de su tiempo de rumia tienen mucha menos acidosis ruminal subaguda (pH ruminal <5.8) en comparación con las vacas que solamente logran permanecer echadas entre un 50 a 60% de su tiempo de rumia. La aglomeración obliga a las vacas a permanecer paradas y podrían experimentan acidosis ruminal subaguda durante 8 a 10 horas diarias, lo que supera bastante al promedio típico de 3 a 4 horas.
La aglomeración y los comederos vacíos traen problemas
Otro estudio en el Instituto Miner encontró que la combinación de un comedero vacío con la aglomeración eleva la acidosis ruminal subaguda a 9 o más horas diarias. Así que, si la meta es evitar un pH ruminal bajo, enfóquese en la ración, pero no se olvide que la aglomeración y el acceso restringido al alimento pueden tener tantos, o incluso más, efectos negativos. La receta para un buen funcionamiento del rumen es una ración balanceada adecuadamente, suministrada a vacas que no están obligadas a comer rápido y que tienen mucho espacio para echarse y rumiar.
El autor es presidente del Instituto de Investigación Agrícola William H. MIner
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